01 octubre 2011

Reciclando y organizando

El sábado es mi día favorito de la semana. Hoy no trabajé con porcelana fría porque me dediqué a organizar mis materiales de bisutería. Tenía prendas que no usaba, rotas o dañadas, y comencé poco a poco a sacar los elementos que podría utilizar en un futuro como: cuentas, ganchos para cerrar, pedazos de cadena, etc. 

Frasco con cuentas de varios tipos
Me di cuenta que tenía muchas cosas y poco espacio y me dediqué a organizar todo. Hice una caja pequeña con divisiones para meter allí todos los ganchos de cerrar, bases de zarcillos, restos de cadena, clavos de bisutería, etc.

Caja organizadora de implementos para bisutería
Aunque la idea no era trabajar en prendas, hice algunas cosas. Tenía un alambre plateado que había comprado hace más de un año y nunca lo use porque resultó ser muy duro. Lo transformé en dos aros y le uní ganchos de zarcillo para tener unas lindas argollas.

Zarcillos de alambre que no había usado

Hace muchos años compré un par de zarcillos que me encantaban: eran dos caracoles con cuentas de madera. Desgraciadamente, uno de los zarcillos se me perdió hace meses. Tenía el otro guardado con la esperanza de que apareciera, pero nunca lo encontré. Como me gusta tanto, decidí convertirlo en un lindo dije para colgar del cuello con un yute corto, tipo gargantilla. Algo muy simple en lo que solo resaltará el caracol solitario.


Dije hecho con un zarcillo cuyo par se perdió

Tenía otro dije en un yute corto muy sencillo: un pequeño coquito. Se había dañado el gancho de cerrar, y si le ponía uno nuevo iba a tener que cambiarle el yute porque éste es muy corto. Se me ocurrió cortar el gancho dañado y meter un alambre por el nudo del yute al cual le dí una forma que permite cerrarlo. Funcionó perfectamente, ya lo puedo usar y no fue necesario cambiar el yute.


Gancho para cerrar improvisado con alambre
Arreglando mis prendas viejas re-descubrí una cadena plateada con unas pequeñas crucecitas que compré en mi época de estudiante. La cadena estaba totalmente manchada y las cruces también, intenté limpiarlas pero algunas cruces quedaron algo amarillas. Con la cadena nada pude hacer. No se de que material es, pero es el metal más malo que he visto, no me extraña, lo compré a un vendedor ambulante a un precio irrisorio. En la foto las cruces no parecen estar tan mal, pero en realidad estaban muy manchadas. Decidí pintarlas con esmalte de uñas y quedaron bastante bien. 

Cruces de metal barato pintadas
Muchas veces tenemos prendas que no usamos. Bien sea porque se dañaron o porque nos las regalaron y no nos gustan (esto es típico de los intercambios de regalo en navidad). Mucha gente desecha o regala estas prendas, pero yo las reviso porque siempre hay algo que me pueda servir: desde una cuenta hasta un cierre de cadena. Y para no acumular muchas cosas, hago de una vez lo más rápido y fácil. Solamente hoy tengo unos aretes, unas cruces que podré usar y dos yutes con dije. Las demás cosas las organicé de manera de encontrarlas rápidamente cuando las necesite.

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